martes, 29 de abril de 2008
Mis recuerdos de la asignatura de Organización Escolar en Maxisterio
En la asignatura de Organización Escolar que impartió Anxo Serafín Porto Ucha en Maxisterio, tratamos muchos temas referentes a la dirección de centros. El doctor Porto Ucha dejó huella, sin duda, en mi aprendizaje y recuerdo muchas de sus explicaciones. Recuerdo innumerables detalles acontecidos en sus clases, referentes a la dirección de centros, pues nos contó más de una anécdota de su currículo, cuando ejerció como director de un colegio. Estuvo varios años en la dirección de un centro y nos explicó las grandes dificultades y complejidades del cargo. Por supuesto, las grandes responsabilidades del mismo.
domingo, 27 de abril de 2008
Mi experiencia en Formación e Actualización na Función Pedagóxica con Gutiérrez Moar y Lourdes Montero

En la asignatura de Formación e Actualización na Función Pedagóxica, que en el curso pasado impartieron María del Carmen Gutiérrez Moar y Lourdes Montero, también hablamos del funcionamiento de un centro, de su dirección y de sus órganos de gobierno, en la nueva ley de educación en España (LOE).
Cabe destacar que los órganos colegiados de gobierno y de coordinación docente de los centros públicos sufrieron algunas modificaciones en relación de las últimas leyes. La LOE., y por consiguiente gran parte de sus enunciados, son una continuación de la LOGSE. En España, con la LOE se dio un nuevo paso hacia la mejora de la enseñanza, tan devaluada por gobiernos anteriores. De todos modos, considero que los órganos de gobierno siguen sin tener el poder y la consideración que es posible necesiten para alcanzar la máxima calidad.
En cuando al Consejo Escolar, cabe destacar que está compuesto, en los centros públicos, por el director del centro, que será su presidente, el jefe de estudios, un concejal o representante del Ayuntamiento, un número de profesores, elegidos por el Claustro (no podrá ser inferior a un tercio del total), un número de padres y de alumnos, elegidos respectivamente por y entre ellos (no podrá ser inferior a un tercio del total), un representante del personal de administración y servicios del centro, el secretario del centro, que actuará como secretario del Consejo (con voz y sin voto). Una vez constituido el Consejo Escolar, éste elegirá a una persona que impulse medidas educativas que fomenten la igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres.
Entre las competencias del consejo, cabe destacar que aprueba y evalúa proyectos y normas, la programación general anual del centro, sin perjuicio de las competencias del Claustro, conocer las candidaturas a la dirección y los proyectos de dirección presentados por los candidatos, participar en la selección del director del centro y decidir sobre la admisión de alumnos.
También, conocer la resolución de conflictos disciplinarios y velar porque se atengan a la normativa vigente, proponer medidas e iniciativas que favorezcan la convivencia en el centro y la igualdad, promover la conservación y renovación de las instalaciones, fijar las directrices para la colaboración, con fines educativos y culturales, con las Administraciones locales, otros centros, entidades y organismos, analizar y valorar el funcionamiento general del centro y la evolución del rendimiento escolar, y elaborar propuestas e informes.
Por su parte, el Claustro de profesores es el órgano propio de participación de los profesores en el gobierno del centro y tiene la responsabilidad de planificar, coordinar, informar y, en su caso, decidir sobre todos los aspectos educativos del centro y estará presidido por el director e integrado por la totalidad de los profesores que presten servicio en el centro.
El Claustro tendrá múltiples competencias. Podemos destacar como más importantes las siguientes: formular al equipo directivo y al Consejo Escolar propuestas para la elaboración de los proyectos del centro y de la programación general anual, aprobar y evaluar la concreción del currículo, fijar los criterios referentes a la orientación, tutoría, evaluación y recuperación de los alumnos, promover iniciativas en el ámbito de la experimentación y de la investigación pedagógica, elegir sus representantes en el Consejo Escolar del centro y participar en la selección del director en los términos establecidos por la presente Ley.
En cuanto a la dirección de los centros públicos, podemos señalar que el equipo directivo estará integrado por el director, el jefe de estudios, el secretario y cuantos miembros determine la Administración educativas. Todos los miembros del equipo directivo cesarán en sus funciones al término de su mandato o cuando se produzca el cese del director.
Entre las competencias del director, podemos mencionar, entre las más importantes, las siguientes: ostentar la representación del centro, representar a la Administración educativa en el mismo y hacerle llegar a ésta las aspiraciones y necesidades de la comunidad educativa, dirigir y coordinar todas las actividades, ejercer la dirección pedagógica, promover la innovación educativa, garantizar el cumplimiento de las leyes y ejercer la jefatura de todo el personal adscrito al centro.
También podemos destacar que tiene la obligación de favorecer la convivencia en el centro, impulsar la colaboración con familias, instituciones y organismos, e impulsar las evaluaciones internas del centro y colaborar en las evaluaciones externas.
Además, el director tendrá que convocar y presidir los actos académicos y las sesiones del Consejo Escolar y del Claustro, así como realizar las contrataciones de obras, servicios y suministros.
Al mismo tiempo, la LOE refleja que la selección del director se realizará mediante un proceso en el que participen la comunidad educativa y la Administración educativa. La selección y nombramiento de directores de los centros públicos se efectuará mediante concurso de méritos entre profesores funcionarios de carrera.
Para ser candidato a director, será necesario tener una antigüedad de al menos cinco años, haber impartido docencia directa durante un periodo de igual duración, estar prestando servicios en un centro público, y presentar un proyecto de dirección que incluya los objetivos, líneas de actuación y evaluación.
Los aspirantes seleccionados deberán superar un programa de formación inicial y la Administración educativa nombrará director de centro por un periodo de cuatro años. El nombramiento de los directores podrá renovarse, por periodos de igual duración.
Sobre el cese del director, la LOE estipula las siguientes condiciones: finalización del período, renuncia aceptada por la Administración, incapacidad física o psíquica sobrevenida y revocación motivada por incumplimiento grave de las funciones inherentes al cargo. Los directores serán evaluados al final de su mandato. Los que obtuvieren evaluación positiva, obtendrán un reconocimiento personal y profesional.
Por tanto, considero que todo el esfuerzo que se haga en la mejora de la escuela pública es necesario por una razón evidente, la necesidad de conseguir algún día una educación de calidad. Y todos los esfuerzos que se hagan son pocos y toda la inversión que se realice para fortalecer la escuela pública es imprescindible. Es fundamental llegar a consensos y no estar cambiando cada cuatro años de leyes educativas. La LOE es un paso más al frente y como decía Álvaro Marchesi no debemos quedarnos parados ni tirar por la borda todo lo que se anduvo hasta ahora.
Bibliografía
http://www.mec.es/
http://www.mec.es/files/Anteproyecto_Ley_Organica_Educacion.pdf
http://www.loe-no.org/
http://www.concejoeducativo.org/article.php?id_article=75
Cabe destacar que los órganos colegiados de gobierno y de coordinación docente de los centros públicos sufrieron algunas modificaciones en relación de las últimas leyes. La LOE., y por consiguiente gran parte de sus enunciados, son una continuación de la LOGSE. En España, con la LOE se dio un nuevo paso hacia la mejora de la enseñanza, tan devaluada por gobiernos anteriores. De todos modos, considero que los órganos de gobierno siguen sin tener el poder y la consideración que es posible necesiten para alcanzar la máxima calidad.
En cuando al Consejo Escolar, cabe destacar que está compuesto, en los centros públicos, por el director del centro, que será su presidente, el jefe de estudios, un concejal o representante del Ayuntamiento, un número de profesores, elegidos por el Claustro (no podrá ser inferior a un tercio del total), un número de padres y de alumnos, elegidos respectivamente por y entre ellos (no podrá ser inferior a un tercio del total), un representante del personal de administración y servicios del centro, el secretario del centro, que actuará como secretario del Consejo (con voz y sin voto). Una vez constituido el Consejo Escolar, éste elegirá a una persona que impulse medidas educativas que fomenten la igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres.
Entre las competencias del consejo, cabe destacar que aprueba y evalúa proyectos y normas, la programación general anual del centro, sin perjuicio de las competencias del Claustro, conocer las candidaturas a la dirección y los proyectos de dirección presentados por los candidatos, participar en la selección del director del centro y decidir sobre la admisión de alumnos.
También, conocer la resolución de conflictos disciplinarios y velar porque se atengan a la normativa vigente, proponer medidas e iniciativas que favorezcan la convivencia en el centro y la igualdad, promover la conservación y renovación de las instalaciones, fijar las directrices para la colaboración, con fines educativos y culturales, con las Administraciones locales, otros centros, entidades y organismos, analizar y valorar el funcionamiento general del centro y la evolución del rendimiento escolar, y elaborar propuestas e informes.
Por su parte, el Claustro de profesores es el órgano propio de participación de los profesores en el gobierno del centro y tiene la responsabilidad de planificar, coordinar, informar y, en su caso, decidir sobre todos los aspectos educativos del centro y estará presidido por el director e integrado por la totalidad de los profesores que presten servicio en el centro.
El Claustro tendrá múltiples competencias. Podemos destacar como más importantes las siguientes: formular al equipo directivo y al Consejo Escolar propuestas para la elaboración de los proyectos del centro y de la programación general anual, aprobar y evaluar la concreción del currículo, fijar los criterios referentes a la orientación, tutoría, evaluación y recuperación de los alumnos, promover iniciativas en el ámbito de la experimentación y de la investigación pedagógica, elegir sus representantes en el Consejo Escolar del centro y participar en la selección del director en los términos establecidos por la presente Ley.
En cuanto a la dirección de los centros públicos, podemos señalar que el equipo directivo estará integrado por el director, el jefe de estudios, el secretario y cuantos miembros determine la Administración educativas. Todos los miembros del equipo directivo cesarán en sus funciones al término de su mandato o cuando se produzca el cese del director.
Entre las competencias del director, podemos mencionar, entre las más importantes, las siguientes: ostentar la representación del centro, representar a la Administración educativa en el mismo y hacerle llegar a ésta las aspiraciones y necesidades de la comunidad educativa, dirigir y coordinar todas las actividades, ejercer la dirección pedagógica, promover la innovación educativa, garantizar el cumplimiento de las leyes y ejercer la jefatura de todo el personal adscrito al centro.
También podemos destacar que tiene la obligación de favorecer la convivencia en el centro, impulsar la colaboración con familias, instituciones y organismos, e impulsar las evaluaciones internas del centro y colaborar en las evaluaciones externas.
Además, el director tendrá que convocar y presidir los actos académicos y las sesiones del Consejo Escolar y del Claustro, así como realizar las contrataciones de obras, servicios y suministros.
Al mismo tiempo, la LOE refleja que la selección del director se realizará mediante un proceso en el que participen la comunidad educativa y la Administración educativa. La selección y nombramiento de directores de los centros públicos se efectuará mediante concurso de méritos entre profesores funcionarios de carrera.
Para ser candidato a director, será necesario tener una antigüedad de al menos cinco años, haber impartido docencia directa durante un periodo de igual duración, estar prestando servicios en un centro público, y presentar un proyecto de dirección que incluya los objetivos, líneas de actuación y evaluación.
Los aspirantes seleccionados deberán superar un programa de formación inicial y la Administración educativa nombrará director de centro por un periodo de cuatro años. El nombramiento de los directores podrá renovarse, por periodos de igual duración.
Sobre el cese del director, la LOE estipula las siguientes condiciones: finalización del período, renuncia aceptada por la Administración, incapacidad física o psíquica sobrevenida y revocación motivada por incumplimiento grave de las funciones inherentes al cargo. Los directores serán evaluados al final de su mandato. Los que obtuvieren evaluación positiva, obtendrán un reconocimiento personal y profesional.
Por tanto, considero que todo el esfuerzo que se haga en la mejora de la escuela pública es necesario por una razón evidente, la necesidad de conseguir algún día una educación de calidad. Y todos los esfuerzos que se hagan son pocos y toda la inversión que se realice para fortalecer la escuela pública es imprescindible. Es fundamental llegar a consensos y no estar cambiando cada cuatro años de leyes educativas. La LOE es un paso más al frente y como decía Álvaro Marchesi no debemos quedarnos parados ni tirar por la borda todo lo que se anduvo hasta ahora.
Bibliografía
http://www.mec.es/
http://www.mec.es/files/Anteproyecto_Ley_Organica_Educacion.pdf
http://www.loe-no.org/
http://www.concejoeducativo.org/article.php?id_article=75
sábado, 26 de abril de 2008
Los modelos en la dirección de centros
La pasada sesión la comenzamos con un pequeño repaso de lo que observamos el día anterior y profundizamos en varios conceptos de interés. En el debate que iniciamos, se registraron varios datos y se señalaron algunos aspectos favorables a la selección, como la garantía de una mayor profesionalidad, el mayor grado de confianza y la imparcialidad.
Asimismo, se señalaron en el debate como señales positivas en la elección el conocimiento interno y la capacidad de liderazgo. También, entre otras, la mayor aceptación por parte del profesorado. A renglón seguido, la profesora expuso unas ideas sacadas de una publicación sobre la profesionalización. Tras escuchar atentamente las diferentes versiones, realizamos en el aula una actividad grupal. Tuvimos que realizar un comentario de texto sobre un párrafo de Gimeno, que hablaba de tres tipos de modelos en la dirección de centros: burocrático, de liderazgo y de clientes. Luego, llegó el debate, en el que se barajaron varios aspectos, interpretaciones y argumentos, como el conflicto de la dirección, su papel y las expectativas acerca de las funciones.
El texto de Gimeno (1997) sobre el que trabajamos es el siguiente: «El conflicto de la dirección, la definición de su papel y las expectativas sobre sus funciones están hoy contextualizadas por el triángulo definido por esos tres ejes: el peso de la pervivencia de un gestor sin modelo propio al servicio de la maquinaria burocrática; las promesas emergentes de poder ser el líder de una comunidad que impulsa un proyecto educativo, y el modelo, en alza, de ser un gestor doblemente determinado, sometido a políticas conservadoras con más controles y menos recursos, por un lado, y a las demandas de sus clientes, por otro. El triunfo de un modelo u otro no lo decidirán los lenguajes, ni tampoco del todo las normas y disposiciones, sino la coherencia y calidad de la acción que aporten sus actores, así como la atracción y apoyo que despierten en la comunidad en la que se inscriben los centros. En este envite no está sólo en juego la eficiencia de un modelo de participación democrática, sino la pervivencia de la escuela pública como opción atractiva, y no sólo para los que no tienen otra solución que acudir a ella».
Asimismo, se señalaron en el debate como señales positivas en la elección el conocimiento interno y la capacidad de liderazgo. También, entre otras, la mayor aceptación por parte del profesorado. A renglón seguido, la profesora expuso unas ideas sacadas de una publicación sobre la profesionalización. Tras escuchar atentamente las diferentes versiones, realizamos en el aula una actividad grupal. Tuvimos que realizar un comentario de texto sobre un párrafo de Gimeno, que hablaba de tres tipos de modelos en la dirección de centros: burocrático, de liderazgo y de clientes. Luego, llegó el debate, en el que se barajaron varios aspectos, interpretaciones y argumentos, como el conflicto de la dirección, su papel y las expectativas acerca de las funciones.
El texto de Gimeno (1997) sobre el que trabajamos es el siguiente: «El conflicto de la dirección, la definición de su papel y las expectativas sobre sus funciones están hoy contextualizadas por el triángulo definido por esos tres ejes: el peso de la pervivencia de un gestor sin modelo propio al servicio de la maquinaria burocrática; las promesas emergentes de poder ser el líder de una comunidad que impulsa un proyecto educativo, y el modelo, en alza, de ser un gestor doblemente determinado, sometido a políticas conservadoras con más controles y menos recursos, por un lado, y a las demandas de sus clientes, por otro. El triunfo de un modelo u otro no lo decidirán los lenguajes, ni tampoco del todo las normas y disposiciones, sino la coherencia y calidad de la acción que aporten sus actores, así como la atracción y apoyo que despierten en la comunidad en la que se inscriben los centros. En este envite no está sólo en juego la eficiencia de un modelo de participación democrática, sino la pervivencia de la escuela pública como opción atractiva, y no sólo para los que no tienen otra solución que acudir a ella».
lunes, 21 de abril de 2008
El marco legal y el origen de la dirección
Para llevar a cabo una nueva sesión de clase, Lourdes Montero nos mandó leer un texto de Viñao Frago. La profesora “amenazó” y al acabar la sesión anterior indicó que aquellos que no lo leyesen, mejor que no viniesen a clase. El personal se lo tomó en serio y se esfumó. Una gran mayoría del alumnado no apareció por clase y durante los primeros minutos de la sesión bromeamos con esta circunstancia. Lourdes se rió mucho, y nosotros también. Lógicamente, explicó que en ningún caso quiso que se entendiese al pie de la letra su afirmación y puntualizó que su única intención era que el alumnado se responsabilizase con su tarea.
que lo que pretendía ante todo era fomentar nuestra responsabilidad hacia las tareas que nos encomendaba, no pretendía amenazarnos ni infundir miedo como algunos parecían haber entendido al ausentarse en la sesión de este día.
De inmediato, se aclaró que el director necesita conocer el marco legal en el que está y debatimos sobre el origen de las normas para la dirección. Insistimos en su evolución y en todos sus cambios.
Lourdes nos contó que si cogemos trozos de la LGE, LODE, LOPEG, LOCE y LOGSE para adivinar a qué ley corresponde cada párrafo, «tendríais serios problemas para encuadrarlo en la ley correspondiente debido a sus semejanzas».
Luego observamos el cuadro de hitos normativos de la dirección y entre Saúl y yo realizamos un pequeño estudio de investigación y seguimiento.
En la LGE (1970), los requisitos se centran en que deben ser profesores titulares funcionarios; el acceso es de selección por parte de la administración teniendo oído al claustro y al consejo de dirección, en una terna de catedráticos y con una antigüedad en el centro como mínimo de un año. Entre sus funciones están ka orientación, la ordenación y la coordinación. El cargo es renovable cada 5 años y se compagina con las funciones docentes.
En la Ley Orgánica del Estatuto de Centros Escolares (LOECE, 1980), la duración es de 3 años (prorrogables en 2 ocasiones más). En la LODE (1985) ya se observa un importante cambio y se pasa a un modelo de elección escolar). En la LOGSE apenas hay cambios en estos aspectos y en la LOPEG (1995) los cambios se centran en la duración, formación y evaluación. Se mantiene la elección y la duración es de 4 años, con dos prórrogas.
En la LOCE (2002), los candidatos deben presentar un proyecto de dirección y el acceso es por selección. En la LOE (2006) se mantienen muchas cuestiones referentes a la dirección. Sólo se permite presentarse al cargo a profesionales ajenos al centro si no hubiese candidatos.
que lo que pretendía ante todo era fomentar nuestra responsabilidad hacia las tareas que nos encomendaba, no pretendía amenazarnos ni infundir miedo como algunos parecían haber entendido al ausentarse en la sesión de este día.
De inmediato, se aclaró que el director necesita conocer el marco legal en el que está y debatimos sobre el origen de las normas para la dirección. Insistimos en su evolución y en todos sus cambios.
Lourdes nos contó que si cogemos trozos de la LGE, LODE, LOPEG, LOCE y LOGSE para adivinar a qué ley corresponde cada párrafo, «tendríais serios problemas para encuadrarlo en la ley correspondiente debido a sus semejanzas».
Luego observamos el cuadro de hitos normativos de la dirección y entre Saúl y yo realizamos un pequeño estudio de investigación y seguimiento.
En la LGE (1970), los requisitos se centran en que deben ser profesores titulares funcionarios; el acceso es de selección por parte de la administración teniendo oído al claustro y al consejo de dirección, en una terna de catedráticos y con una antigüedad en el centro como mínimo de un año. Entre sus funciones están ka orientación, la ordenación y la coordinación. El cargo es renovable cada 5 años y se compagina con las funciones docentes.
En la Ley Orgánica del Estatuto de Centros Escolares (LOECE, 1980), la duración es de 3 años (prorrogables en 2 ocasiones más). En la LODE (1985) ya se observa un importante cambio y se pasa a un modelo de elección escolar). En la LOGSE apenas hay cambios en estos aspectos y en la LOPEG (1995) los cambios se centran en la duración, formación y evaluación. Se mantiene la elección y la duración es de 4 años, con dos prórrogas.
En la LOCE (2002), los candidatos deben presentar un proyecto de dirección y el acceso es por selección. En la LOE (2006) se mantienen muchas cuestiones referentes a la dirección. Sólo se permite presentarse al cargo a profesionales ajenos al centro si no hubiese candidatos.
lunes, 14 de abril de 2008
La historia de la dirección de centros en Primaria y en Secundaria

La sesión de hoy la comenzó Lourdes Montero con una cita de Morin (2001): «Todo conocimiento es un proceso que comienza con una percepción y una reconstrucción, pasos en los que están muy presentes las ilusiones y los errores». La profesora comentó que esta frase recoge muy bien lo que se habló en la última sesión del pasado martes. A continuación, y siguiendo un cuadro de acontecimientos e hitos históricos que tenía Saúl Olveira de un trabajo que realizó en Magisterio, iniciamos un repaso sobre la historia de la dirección en Primaria y en Secundaria.
La ayuda de Saúl, con el cuadro que aportó en clase, fue muy relevante.
Pascual Pacheco, Roberto, Aurelio Villa Sánchez y Elena Auzmendi Escribano. El liderazgo transformacional de los centros docentes. Mensajero. Bilbao, 1993.
Pascual, Roberto (coord.). La gestión educativa ante la innovación y el cambio. II Congreso Mundial. Vasco/Narcea, Madrid, 1988.
Pascual, Roberto (coord.). La gestión educativa ante la innovación y el cambio. II Congreso Mundial. Vasco/Narcea, Madrid, 1988.
domingo, 13 de abril de 2008
La evolución histórica de la dirección de centros
Siguiendo con la evolución histórica de la función directiva, podemos destacar muchos aspectos y puntualizaciones. En una de las sesiones con Lourdes Montero se habló de que cronológicamente la dirección en Educación Secundaria. fue la primera en aparecer, pues siempre hubo más de un profesional en cada uno de los centros. La dirección en Educación Primaria nació al ir transformándose las escuelas unitarias.
En cuanto a la historia de la dirección de centros, cabe destacar las siguientes fechas: 1905, oficial el modelo de escuela graduada; 1918, nació el Reglamento de Escuelas Graduadas; 1945, comenzó a regularse la dirección de centros en Primaria; 1953, nació la Ley de Ordenación de la Enseñanza Media; 1967, se produjo una profesionalización de la función directiva y se estableció un cuerpo de directores en Primaria.
Al mismo tiempo, cabe destacar que durante todos estos años las continuas leyes fueron cambiando el modo de seleccionar y elegir los directores de centro. Por eso, hacemos un pequeño repaso sobre las distintas leyes a lo largo de la historia.
Con la LGE (1970), Requisitos: profesores titulares funcionarios; Acceso: selección por parte de la administración teniendo oído al claustro y al consejo de dirección; terna de catedráticos; antigüedad en el centro como mínimo de 1 año; Funciones: se aumentarán funciones pero no se reformularán; orientación, ordenación y coordinación del profesorado; Duración: renovable cada 5 años.
Con la LGE (1970) se abandonó el modelo profesional de dirección al desaparecer el Cuerpo de Directores. En la LOECE, Ley Orgánica de Estatuto de Centros Escolares (1980), se caracteriza por tratar de introducir el aspecto democrático, con una duración de 3 años prorrogables en 2 ocasiones más.La LODE (1985) representa un gran cambio entre un modelo y otro, pues se pasa a un modelo por elección, que estaba caracterizado por la participación (la comunidad educativa a través del consejo escolar). La LOGSE se centra más en cuestiones de autonomía y no hay elementos demasiado novedosos con respecto al tema de la dirección. La LOPEG (1995) permite los ajustes entre la LODE y la LOGSE en el tema de la dirección y los cambios van dirigidos a la duración, la formación y la evaluación. Continúa con la elección. En la LOCE (2002) existe un intento de armonizar a los que quieren una profesionalización y acreditación con los que no. Hay que presentar un proyecto de dirección y se rompe con el modelo de participación, pues el acceso es ahora por selección. En la LOE (2006) se mantienen prácticamente iguales las cuestiones ligadas a la dirección.
http://www.cibernetia.com/tesis_es/PEDAGOGIA/ORGANIZACION_Y_PLANIFICACION_DE_LA_EDUCACION/ORGANIZACION_Y_DIRECCION_DE_LAS_INSTITUCIONES_EDUCATIVAS/3
http://www.unileon.es/temario.php?cod=1007122
En cuanto a la historia de la dirección de centros, cabe destacar las siguientes fechas: 1905, oficial el modelo de escuela graduada; 1918, nació el Reglamento de Escuelas Graduadas; 1945, comenzó a regularse la dirección de centros en Primaria; 1953, nació la Ley de Ordenación de la Enseñanza Media; 1967, se produjo una profesionalización de la función directiva y se estableció un cuerpo de directores en Primaria.
Al mismo tiempo, cabe destacar que durante todos estos años las continuas leyes fueron cambiando el modo de seleccionar y elegir los directores de centro. Por eso, hacemos un pequeño repaso sobre las distintas leyes a lo largo de la historia.
Con la LGE (1970), Requisitos: profesores titulares funcionarios; Acceso: selección por parte de la administración teniendo oído al claustro y al consejo de dirección; terna de catedráticos; antigüedad en el centro como mínimo de 1 año; Funciones: se aumentarán funciones pero no se reformularán; orientación, ordenación y coordinación del profesorado; Duración: renovable cada 5 años.
Con la LGE (1970) se abandonó el modelo profesional de dirección al desaparecer el Cuerpo de Directores. En la LOECE, Ley Orgánica de Estatuto de Centros Escolares (1980), se caracteriza por tratar de introducir el aspecto democrático, con una duración de 3 años prorrogables en 2 ocasiones más.La LODE (1985) representa un gran cambio entre un modelo y otro, pues se pasa a un modelo por elección, que estaba caracterizado por la participación (la comunidad educativa a través del consejo escolar). La LOGSE se centra más en cuestiones de autonomía y no hay elementos demasiado novedosos con respecto al tema de la dirección. La LOPEG (1995) permite los ajustes entre la LODE y la LOGSE en el tema de la dirección y los cambios van dirigidos a la duración, la formación y la evaluación. Continúa con la elección. En la LOCE (2002) existe un intento de armonizar a los que quieren una profesionalización y acreditación con los que no. Hay que presentar un proyecto de dirección y se rompe con el modelo de participación, pues el acceso es ahora por selección. En la LOE (2006) se mantienen prácticamente iguales las cuestiones ligadas a la dirección.
http://www.cibernetia.com/tesis_es/PEDAGOGIA/ORGANIZACION_Y_PLANIFICACION_DE_LA_EDUCACION/ORGANIZACION_Y_DIRECCION_DE_LAS_INSTITUCIONES_EDUCATIVAS/3
http://www.unileon.es/temario.php?cod=1007122
sábado, 12 de abril de 2008
Algunas experiencias con la dirección de centros en otras asignaturas

Lourdes Montero nos pidió en este portafolio que reflexionásemos sobre cada uno de los conceptos y cada uno de los temas que se trabajan en clase. También nos pidió que relacionáramos todo este aprendizaje con el desarrollado en otras asignaturas, tanto en Magisterio como en Pedagogía. Creo que durante estos años puedo sacar muchas conclusiones al respecto, pues son varias las materias en las que tratamos temas relacionados con la dirección de centros.
Así por encima, recuerdo las clases magistrales de Anxo Porto Ucha (Organización Escolar), una asignatura que me encantó y que me permitió ampliar mucho el conocimiento sobre los centros y los equipos directivos. También recuerdo las clases de Carlos Rosales, en las que a veces tratamos temas similares. No puedo olvidarme de la asignatura que el año pasado compartió Lourdes Montero con María del Carmen Gutiérrez Moar. Con mi gran amiga y compañera Goretti González Orol tuve que hacer un trabajo sobre la dirección de centro, que expusimos en el aula.De todos modos, hoy podría hacer algunos comentarios sobre otra materia que cursamos en el primer cuatrimestre con Antonio Rial (Xestión e Desenvolvemento Institucional de Centros Educativos). Con Antonio Rial hablamos del liderazgo y de las características de un líder. El profesor se refirió en más de una ocasión al ejercicio de autoridad y a la importancia y relevancia de la toma de decisiones para poder lograr los objetivos marcados. De un líder se pueden decir y analizar muchas cosas. Hay líderes naturales y otros líderes que con el paso del tiempo aprenden a serlo, es decir, diferenciaba Antonio Rial entre los líderes que nacen o que se hacen.
Así por encima, recuerdo las clases magistrales de Anxo Porto Ucha (Organización Escolar), una asignatura que me encantó y que me permitió ampliar mucho el conocimiento sobre los centros y los equipos directivos. También recuerdo las clases de Carlos Rosales, en las que a veces tratamos temas similares. No puedo olvidarme de la asignatura que el año pasado compartió Lourdes Montero con María del Carmen Gutiérrez Moar. Con mi gran amiga y compañera Goretti González Orol tuve que hacer un trabajo sobre la dirección de centro, que expusimos en el aula.De todos modos, hoy podría hacer algunos comentarios sobre otra materia que cursamos en el primer cuatrimestre con Antonio Rial (Xestión e Desenvolvemento Institucional de Centros Educativos). Con Antonio Rial hablamos del liderazgo y de las características de un líder. El profesor se refirió en más de una ocasión al ejercicio de autoridad y a la importancia y relevancia de la toma de decisiones para poder lograr los objetivos marcados. De un líder se pueden decir y analizar muchas cosas. Hay líderes naturales y otros líderes que con el paso del tiempo aprenden a serlo, es decir, diferenciaba Antonio Rial entre los líderes que nacen o que se hacen.
¿Qué motivación tiene un profesional para querer acceder a la dirección de un centro educativo?

Nada más comenzar la sesión del 8 de abril, Lourdes Montero nos preguntó cuáles fueron las reflexiones que subimos del día anterior al portafolio. La verdad es que la sesión del lunes, 7 de abril, fue intensa y muy productiva. Es evidente que el tema a tratar obliga a muchas reflexiones. La dirección de un centro escolar es algo que muchas veces se pasa por encima y que provoca grandes conflictos. La noticia publicada por La Voz de Galicia, que analizamos detenidamente en estas sesiones, obliga a reconducir muchas cuestiones sobre el tema.
En mi opinión, la motivación para presentarse a un cargo de director es escasa. Económicamente no es suficiente. No basta con tener la virtud de liderazgo, hay que disponer de muchas más virtudes.
Por ejemplo, en mi experiencia como maestro en prácticas y como pedagogo en prácticas, pude observar el gran trabajo que desarrolla un director y su equipo directivo. Son muchas las horas que se pasan en el centro, casi todas las tardes de la semana acuden a su puesto de trabajo y son muchísimas las cuestiones que tienen que resolver a diario. Muchas de ellas ingratas e impopulares en versión de sus compañeros. Por eso, aunque la cuestión económica es importante, clave diría yo, son más los aspectos que se deben analizar. Hay que entrar más profundamente en el problema y averiguar cuáles son los motivos por los que nadie, o casi nadie, quiere asumir tantas responsabilidades. Tal vez el escaso apoyo que se recibe de las administraciones o la escasísima autonomía que tiene un director podrían ser razones más que suficientes para darle la espalda al puesto.
Tomando como referencia la sesión del día anterior, en el aula formulamos una serie de cuestiones. ¿Es el aspecto económico decisivo a la hora de tomar la decisión de presentarse al puesto de director? ¿La ausencia de incentivos económicos es el principal problema que se plantea?
En el debate de clase, se habló largo y tendido de los escasos incentivos económicos recibidos en la actualidad por un director de centro, la motivación para desempeñar el cargo, los valores y los escasos apoyos con los que cuenta.
La sesión de hoy fue completa. Dos horas de clase, bien aprovechadas, dan para mucho. En la segunda parte de la hora nos centramos en la evolución histórica de la función directiva. Para comprobar los conocimientos previos del alumnado, Lourdes Montero puso en marcha un pequeño juego de grupo en el que cada uno decía una palabra o una pequeña frase para ir enlazando con el resto de la clase e ir construyendo un relato acerca la evolución histórica de la dirección. El resultado final fue patético. Horrible. No había por dónde entrarle. Mencionamos numerosos aspectos y propusimos ciertos relatos que nada tenían nada que ver con lo que se estaba trabajando en clase.
Entonces, la profesora nos pidió para la siguiente sesión que fuésemos con los deberes hechos y aconsejó, para darle mayor ritmo a la sesión, que buscásemos los hitos históricos de la función directiva.Explicó que la historia nos lleva a la Educación Primaria para ver el comienzo de la dirección de centros. Se produjo con la transformación de las escuelas unitarias en escuelas graduadas, es decir, cuando pasaron a tener más de un maestro.
En mi opinión, la motivación para presentarse a un cargo de director es escasa. Económicamente no es suficiente. No basta con tener la virtud de liderazgo, hay que disponer de muchas más virtudes.
Por ejemplo, en mi experiencia como maestro en prácticas y como pedagogo en prácticas, pude observar el gran trabajo que desarrolla un director y su equipo directivo. Son muchas las horas que se pasan en el centro, casi todas las tardes de la semana acuden a su puesto de trabajo y son muchísimas las cuestiones que tienen que resolver a diario. Muchas de ellas ingratas e impopulares en versión de sus compañeros. Por eso, aunque la cuestión económica es importante, clave diría yo, son más los aspectos que se deben analizar. Hay que entrar más profundamente en el problema y averiguar cuáles son los motivos por los que nadie, o casi nadie, quiere asumir tantas responsabilidades. Tal vez el escaso apoyo que se recibe de las administraciones o la escasísima autonomía que tiene un director podrían ser razones más que suficientes para darle la espalda al puesto.
Tomando como referencia la sesión del día anterior, en el aula formulamos una serie de cuestiones. ¿Es el aspecto económico decisivo a la hora de tomar la decisión de presentarse al puesto de director? ¿La ausencia de incentivos económicos es el principal problema que se plantea?
En el debate de clase, se habló largo y tendido de los escasos incentivos económicos recibidos en la actualidad por un director de centro, la motivación para desempeñar el cargo, los valores y los escasos apoyos con los que cuenta.
La sesión de hoy fue completa. Dos horas de clase, bien aprovechadas, dan para mucho. En la segunda parte de la hora nos centramos en la evolución histórica de la función directiva. Para comprobar los conocimientos previos del alumnado, Lourdes Montero puso en marcha un pequeño juego de grupo en el que cada uno decía una palabra o una pequeña frase para ir enlazando con el resto de la clase e ir construyendo un relato acerca la evolución histórica de la dirección. El resultado final fue patético. Horrible. No había por dónde entrarle. Mencionamos numerosos aspectos y propusimos ciertos relatos que nada tenían nada que ver con lo que se estaba trabajando en clase.
Entonces, la profesora nos pidió para la siguiente sesión que fuésemos con los deberes hechos y aconsejó, para darle mayor ritmo a la sesión, que buscásemos los hitos históricos de la función directiva.Explicó que la historia nos lleva a la Educación Primaria para ver el comienzo de la dirección de centros. Se produjo con la transformación de las escuelas unitarias en escuelas graduadas, es decir, cuando pasaron a tener más de un maestro.
lunes, 7 de abril de 2008
Un debate sobre el artículo de La Voz de Galicia acerca de la poca motivación para presentarse a la dirección de centros

El documento era de La Voz de Galicia, firmado por mi compañera Elisa Álvarez (en la fotografía), y que trataba acerca de la problemática de presentarse al puesto de director. La actividad se hizo en pequeños grupos. En primer lugar, tras la lectura, reflexionamos sobre los datos más interesantes, antes de iniciar el debate.
Entre las ideas principales que sacamos en conclusión, podemos destacar que un porcentaje muy bajo de profesores querían ser directores por iniciativa propia, pues una parte muy importante son nombrados por la Administración ante la falta de candidatos.Inicialmente consideramos que son varias las razones, o al menos eso entendimos nosotros, por las que el cargo resulta poco atractivo, como por ejemplo la falta de incentivos económicos y de reconocimiento. Los directores tampoco se ven muy respaldos por la Administración.Los directores, entre las cuestiones que se destacaban en el artículo, consideran que asumen demasiadas responsabilidades. También, podemos destacar que la falta de candidatos podría deberse a que los profesionales no quiere asumir ese tipo de responsabilidades.Al acabar la clase, se realizó un amplio debate y los temas sobre los que más dialogamos podemos centrarlos en el aumento de responsabilidades, el carácter de la persona que se presenta (liderazgo), la falta de apoyo, etcétera.Asimismo, debatimos sobre si los directores deben tener funciones docentes o si los salarios deberían ser incrementados de forma considerable. ¿Habría entonces más candidatos?. Además, sacamos en conclusión que los problemas de la dirección en Primaria están más relacionados con los profesores. En Secundaria, más con los alumnos.
http://www.lavozdegalicia.es/galicia/2008/02/17/0003_6575142.htm
Mi primer día de clase

Cuando llegué a clase, Lourdes Montero me saludó y me dio la bienvenida. Creo, sinceramente, que se alegró al verme. Yo, también. Fue mi reencuentro con una profesora que no pasó desapercibida en el curso pasado.
Como ya Saúl le había comentado mi situación, llegué a mi primer día de clase con los deberes más o menos hechos. Es decir, durante los días anteriores estuve leyendo todo lo que había publicado Saúl en su blog.
Algunas de las clases anteriores se centraron en el portafolio y en los criterios de evaluación. Lourdes Montero explicó que el portafolio tiene una doble función. Por un lado sirve para recoger y reflejar experiencias; y en segundo término sirve para informar. Por eso, implica selección, posibilita una autoevaluación y debe tener sentido explícito.
En cualquier portafolio no deben faltar diversos apartados, como Índice, Introducción, observaciones, narración del proceso, conclusiones, etcétera.
También habló Lourdes Montero del programa y de los criterios de evaluación. También destacó la importancia de hacer revisiones previas del portafolio para observar su evolución y hacer comentarios para mejorado.
En cualquier portafolio no deben faltar diversos apartados, como Índice, Introducción, observaciones, narración del proceso, conclusiones, etcétera.
También habló Lourdes Montero del programa y de los criterios de evaluación. También destacó la importancia de hacer revisiones previas del portafolio para observar su evolución y hacer comentarios para mejorado.
La ayuda de Saúl y la decisión de realizar el diario en un blog

Decidí iniciar este sistema de evaluación por la primera experiencia que tuve en Magisterio (Educación Primaria) con la profesora Adriana Gewerc, en Novas Tecnoloxías Aplicadas a la Educación. Mi primer blog que hice con Adriana, todavía lo mantengo hoy en día y allí escribo de cuestiones muy variadas, aunque últimamente sólo se me da por escribir las «proezas» deportuvas de mi hijo. Mi blog es: http://ijcalvorios.blogia.com/ .
En Magisterio tuvimos que trabajar muchísimo en aquel cuatrimestre y la verdad es que nos adaptamos perfectamente al blog, al portafolio y a todo lo que manejamos con Adriana. Por eso, no tuve ni la más mínina duda en iniciar el diario de clase en un blog.
Lo primero que hice, al tener que ausentarme en las primeras sesiones, fue leerme de arriba abajo los excelentes apuntes y el gran diario de Saúl, para ir tomando nota y ponerme rápidamente al día. Saúl no dudó en ayudarme desde el primer momento, algo que por supuesto tengo que agradecerle en este blog.
Lo primero que hice, al tener que ausentarme en las primeras sesiones, fue leerme de arriba abajo los excelentes apuntes y el gran diario de Saúl, para ir tomando nota y ponerme rápidamente al día. Saúl no dudó en ayudarme desde el primer momento, algo que por supuesto tengo que agradecerle en este blog.
Mi reencuentro con Lourdes Montero
Hoy es mi primer día en clase. Por cuestiones de trabajo, me fue imposible asitir hasta ahora a la asignatura de Dirección de Centros Educativos que imparte en el segundo cuatrimestre de cuarto curso la Doctora Lourdes Montero. No tuve ninguna duda a la hora de elegir la materia. Fue suficiente con saber el nombre del profesor. En tercero, Lourdes Montero impartió la mitad de otra asignatura y sus clases fueron entretenidas, divertidas y, por supuesto, es justo reconocerlo, de gran valor. Por eso, la decisión fue sencilla.
Además, al conocerla me fue más fácil explicarle los motivos por los que no pude asitir en las dos primeras semanas. Por cuestiones de trabajo tuve que desplazarme a Madrid. Se lo comenté a mi amigo y compañero Saúl Olveira, para que le transmitiese mi situación a la profesora ante la imposibilidad de acudir a las sesiones. Y fue precisamente Saúl quien me convenció para llevar el diario de la materia en un blog.
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